Nearshoring México

Muchos empresarios de todo el mundo iniciaron una deslocalización de sus centros de producción debido a la pandemia, al cierre y posterior reapertura, así como a la ruptura que se originó en las cadenas de suministro, provocada en parte por la dependencia de la producción asiática.

La deslocalización ayuda a diversificar los riesgos al acercar la producción a los destinos comerciales, de modo que una situación de riesgo similar en el futuro no condicione ni determine el suministro en el país.

Uno de los beneficios del nearshoring en México, y presumiblemente el mayor, es la frontera terrestre compartida con Estados Unidos, que permite el acceso al gran mercado estadounidense. Casi el 88% de las exportaciones mexicanas con destino a EE.UU. se transportan por carretera a este país, lo que significa que el comercio entre los dos países evita, en general, las interrupciones de puertos y contenedores que afectaron al comercio marítimo mundial durante el año pasado.

Esto se puede corroborar echando un vistazo a la evolución actual de la IED en México, que muestra un fuerte repunte, ya que las entradas en el primer semestre de 2022 fueron equivalentes a la media anual de los últimos 23 años. La industria manufacturera representa más del 45% del total de la IED de México y de esa cantidad, aproximadamente el 30% se destina a equipos de transporte, constituyendo la parte más importante de la economía de exportación de México.

México como oportunidad de nearshoring otorga grandes beneficios a los países, principalmente a los estados unidos y Canadá y ha demostrado su atractivo en los últimos años.

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